La ciudad de Libertador General San Martín es cabecera del departamento Ledesma, que ocupa 3.249 kilómetros cuadrados de la provincia de Jujuy.
Esta ciudad, que fue escenario la semana pasada de los hechos de violencia que dejaron un saldo de cuatro muertos y más de cincuenta heridos, está enclavada en un territorio cuyo desarrollo económico es imposible de desvincular al Ingenio Ledesma, uno de los grupos empresarios más importantes y tradicionales de la Argentina.
Con cerca de 100.000 hectáreas productivas en Jujuy, Entre Ríos, Buenos Aires y Salta, el ingenio azucarero que comenzó a funcionar hace poco más de 100 años es el principal productor de azúcar del país, con una participación del 20%; es también el productor número uno de papel, con un 40% de participación. Además, es el primer productor y exportador de naranjas del país y un importante elaborador de jugos. También tiene poco más de 50.000 hectáreas avocadas a lo producción agrícola y ganadera.
Sus activos suman seis plantas procesadoras, la más importante en Libertador General San Martín, donde procesa caña de azúcar y produce alcohol, bioetanol, celulosa y papel, a la que se agrega la planta de molienda húmeda de maíz Glucovil en San Luis, donde tiene una participación del 70% ; el 30% restante es de Cargill; una planta elaboradora de cuadernos y repuestos y otra de papel encapado, también en San Luis, y una planta de empaque de frutas y otra de elaboración de cítricos en Salta.
Según informa la propia empresa, tiene participación, también, en la exploración y explotación de petróleo y gas en el Yacimiento Aguaragüe, en Salta. En el mercado de etanol, que se usa para cortar las naftas, la empresa obtuvo la mayor participación en el cupo otorgado por el gobierno nacional para este año y abastecerá el 23% del biocombustible que recibirán las petroleras en 2011, a un valor actual de $ 3,35 según publica cada mes la Secretaría de Energía.
Según informó a la Bolsa de Comercio, Ledesma obtuvo, en el tercer trimestre fiscal, una ganancia de $ 152,7 millones.
Hoy, la economía del departamento de Ledesma y hasta su organización poblacional está vinculada a las decisiones de la familia dueña de la empresa, los Blaquier, que entraron al ingenio cuando el actual número uno, Carlos Pedro Blaquier, tenía 45 años.
Según fuentes de Ledesma, en la década del 80 la firma donó 200 hectáreas para planes de vivienda y en 2008, los abogados de la empresa estructuraron un acuerdo que se rubricó con el gobierno provincial, los gobiernos municipales de Libertador General San Martín y la lindante Calilegüa, por el que se comprometió la cesión de 80 hectáreas para vivienda, de las cuales efectivamente se entregaron 26.
Las viviendas que debieron construirse no están y la gente perdió la paciencia. Unas 700 familias ocuparon 15 hectáreas y desde Ledesma hicieron la denuncia de usurpación. Un juez dictó la orden de desalojo y ocasionó el desastre. Mientras la Corriente Clasista y Combativa implica a funcionarios y a la propia empresa como responsables del hecho, desde Ledesma dicen que son los primeros sorprendidos.
En un comunicado, la empresa lamentó las víctimas y desmintió que personal afectado a la compañía haya participado de los desalojo.
Con cerca de 100.000 hectáreas productivas en Jujuy, Entre Ríos, Buenos Aires y Salta, el ingenio azucarero que comenzó a funcionar hace poco más de 100 años es el principal productor de azúcar del país, con una participación del 20%; es también el productor número uno de papel, con un 40% de participación. Además, es el primer productor y exportador de naranjas del país y un importante elaborador de jugos. También tiene poco más de 50.000 hectáreas avocadas a lo producción agrícola y ganadera.
Sus activos suman seis plantas procesadoras, la más importante en Libertador General San Martín, donde procesa caña de azúcar y produce alcohol, bioetanol, celulosa y papel, a la que se agrega la planta de molienda húmeda de maíz Glucovil en San Luis, donde tiene una participación del 70% ; el 30% restante es de Cargill; una planta elaboradora de cuadernos y repuestos y otra de papel encapado, también en San Luis, y una planta de empaque de frutas y otra de elaboración de cítricos en Salta.
Según informa la propia empresa, tiene participación, también, en la exploración y explotación de petróleo y gas en el Yacimiento Aguaragüe, en Salta. En el mercado de etanol, que se usa para cortar las naftas, la empresa obtuvo la mayor participación en el cupo otorgado por el gobierno nacional para este año y abastecerá el 23% del biocombustible que recibirán las petroleras en 2011, a un valor actual de $ 3,35 según publica cada mes la Secretaría de Energía.
Según informó a la Bolsa de Comercio, Ledesma obtuvo, en el tercer trimestre fiscal, una ganancia de $ 152,7 millones.
Hoy, la economía del departamento de Ledesma y hasta su organización poblacional está vinculada a las decisiones de la familia dueña de la empresa, los Blaquier, que entraron al ingenio cuando el actual número uno, Carlos Pedro Blaquier, tenía 45 años.
Según fuentes de Ledesma, en la década del 80 la firma donó 200 hectáreas para planes de vivienda y en 2008, los abogados de la empresa estructuraron un acuerdo que se rubricó con el gobierno provincial, los gobiernos municipales de Libertador General San Martín y la lindante Calilegüa, por el que se comprometió la cesión de 80 hectáreas para vivienda, de las cuales efectivamente se entregaron 26.
Las viviendas que debieron construirse no están y la gente perdió la paciencia. Unas 700 familias ocuparon 15 hectáreas y desde Ledesma hicieron la denuncia de usurpación. Un juez dictó la orden de desalojo y ocasionó el desastre. Mientras la Corriente Clasista y Combativa implica a funcionarios y a la propia empresa como responsables del hecho, desde Ledesma dicen que son los primeros sorprendidos.
En un comunicado, la empresa lamentó las víctimas y desmintió que personal afectado a la compañía haya participado de los desalojo.